Favorece la conciliación familiar, incrementa la productividad y reduce los costes fijos para la empresa, estas son sólo algunas de las ventajas del teletrabajo, una fórmula que no ha dejado de extenderse en los últimos años.
Sin embargo, conviene seguir una serie de pautas para que no acabemos echando de menos la oficina a las primeras de cambio. Estos son nuestros consejos para que te conviertas en el perfecto teletrabajador.
Establece una rutina al levantarte
Es probable que al pensar en trabajar desde casa lo primero que se te haya venido a la cabeza sea hacerlo cómodamente en pijama. No caigas en la tentación. Actívate cada mañana siguiendo una rutina. ¿Qué tal un poco de ejercicio y una ducha después de desayunar?
Utiliza un espacio específico
Conviene que dispongas de una habitación propia y, si no es posible, al menos de un espacio aislado. Tu mente lo asociará al trabajo y serás notablemente más productivo. Además, es importante que tu familia conozca tus horarios para evitar cualquier tipo de interrupción. Trabajas en casa, sí, pero eso no quiere decir que estés disponible.
Fija horarios
Aquí el riego es doble. Puede ocurrir que el teletrabajo te vuelva más perezoso y reduzcas tus jornadas o todo lo contrario, que te conviertas en una persona pegada al ordenador. Fija horarios realistas y trata de cumplirlos a rajatabla. Ya lo decía Aristóteles, en el término medio está la virtud.
Mantén la comunicación con tu empresa
Whatsapp, Gmail, Skype, llamadas de teléfono, redes sociales… cualquier herramienta es buena para mantener un flujo de comunicación constante con tu empresa. Mantener una comunicación fluida resulta imprescindible para que vuestra productividad no se resienta respecto a la oficina tradicional.
Aléjate de las distracciones
Sí, somos conscientes de que eres una persona adulta que sabe cómo dominar sus impulsos. Sin embargo, puedes ponértelo un poco más fácil alejándote de las tradicionales fuentes de distracción: libros, discos, revistas, televisión… y de las que traen de cabeza a muchos departamentos de recursos humanos: las redes sociales. Eso sí, si eres community manager será mejor que no salgas de ellas.
Mantén tus amistades
Acudir diariamente a la oficina tiene una gran ventaja, nos permite socializar en persona con nuestros compañeros. Por eso es tan importante que, cuando acabe tu jornada laboral, quedes con tus amigos y aproveches para desarrollar alguna actividad que te relaje. Tu cuerpo y tu mente te lo agradecerán a la mañana siguiente.
¿Eres tú el jefe?
Si diriges una empresa y temes dar una oportunidad al teletrabajo, te recomendamos esta interesante ponencia.
La imagen que ilustra este post pertenece a THOR.