Es posible que en las últimas semanas hayas oído hablar sobre el Erasmus+, el programa de becas aprobado recientemente por la Unión Europea. ¿Quieres saber en qué consiste? Continúa leyendo.
A finales de junio, la Unión Europea, el Ejecutivo comunitario y el Parlamento Europeo acordaron el nuevo plan de movilidad de estudiantes, vigente entre 2014 y 2020, que llevará el nombre de Erasmus+ y aglutinará los siete esquemas de movilidad existentes, entre los que se encuentran Erasmus, Leonardo Da Vinci, Edulink y Juventud en Acción.
Pese a que en los últimos tiempos se ha cuestionado la viabilidad de este tipo de programas, la Comisión Europea ha decidido apostar claramente por ellos. De este modo, se espera que las próximas generaciones estén, además de bien formadas, capacitadas para la movilidad laboral, una realidad que tendrán que asumir durante su carrera profesional.
Para ello, se ha establecido un presupuesto de 14.500 millones de euros, casi un 40% más que en el periodo de 2007 a 2013. Gracias a estas cifras, cuatro millones de jóvenes europeos podrán beneficiarse de alguna de las becas convocadas, entre las que se incluyen nuevos programas para voluntarios y para deportistas en las categorías de base.
También habrá más oportunidades para que las instituciones educativas y las organizaciones juveniles participen en programas de intercambio para realizar prácticas, así como con las empresas para promover la innovación y la empleabilidad.
Además, se creará un sistema de garantía de préstamos para ayudar a los estudiantes de master a financiar sus estudios en el extranjero y se impulsarán cuatrocientas “Alianzas de conocimiento” y “Alianzas de conocimiento por sector”, o, lo que es lo mismo, asociaciones entre instituciones de educación superior y empresas para ofrecer distintas oportunidades de aprendizaje.
¿Cómo afecta el programa Erasmus+ a los estudiantes españoles?
Erasmus+ tratará de eliminar las abultadas diferencias económicas que existían hasta ahora entre las dotaciones económicas de los países participantes. Por este motivo, Bruselas fijará una cantidad mínima a percibir por el candidato en función del país de destino, y no sólo una máxima, como se venía haciendo hasta ahora.
Este cambio afectará a países como España, que tradicionalmente ha concedido muchas becas pero de escasa cuantía. En este sentido, es posible que en los próximos años descienda el número de becarios de nuestro país, que, sin embargo, viajará con mejores ayudas que las que se han concedido hasta ahora.