Acabas de terminar una carrera universitaria o un módulo de Formación Profesional y te han ofrecido un contrato de prácticas. ¿Te gustaría saber en qué consiste? Entonces sigue leyendo.
¿Qué es un contrato de prácticas?
Se trata de una modalidad laboral temporal y formativa que permite la inserción en el mercado de trabajo de aquellos jóvenes que han obtenido un título universitario, de Formación Profesional o un certificado de profesionalidad. Este contrato no debe confundirse con las becas, con las prácticas no laborales ni con el módulo de Formación en Centros de Trabajo necesarios para superar la Formación Profesional.
¿Quiénes pueden optar a este tipo de contrato?
Todos aquellos que hayan obtenido uno de los titulados citados anteriormente durante los cinco años anteriores a la fecha de contratación, siete en el caso de trabajadores minusválidos.
¿Cómo se desarrolla la relación laboral?
El trabajo asignado al empleado debe estar relacionado con su nivel de estudios. Se establecerá un periodo de prueba de dos meses para los titulados de grado superior y de uno para los de grado medio.
El contrato debe concretarse por escrito y la jornada puede ser a tiempo completo o parcial. En cualquier caso, será siempre menor que la del trabajador a tiempo completo comparable.
La duración oscilará entre los seis meses y los dos años, pudiéndose pactar prórrogas hasta alcanzar el límite de los doce meses. Las prórrogas deben durar un mínimo de seis meses.
¿Qué retribución se asigna al trabajador?
La retribución vendrá asignada por convenio colectivo. En caso de que esta no se mencione, no podrá ser inferior al 60% (durante el primer año) y un 75% (a lo largo del segundo) del salario acordado para aquellos trabajadores que desempeñen un puesto equivalente.
El empleado no cobrará en ningún caso menos que el Salario Mínimo Interprofesional cuando esté contratado a jornada completa. En caso de trabajar a tiempo parcial, su salario se reducirá proporcionalmente.
¿Qué ocurre al término del contrato?
Si el trabajador continúa en la empresa, no se podrá establecer un nuevo periodo de prueba. Además, la duración de las prácticas pasará a formar parte de su antigüedad en la empresa.