Once trucos para mejorar la creatividad

Mejorar la creatividad nos proporcionará una serie de herramientas indispensables para nuestros estudios.

A veces entendemos creatividad como esa característica reservada a los artistas, que los hace capaces de crear arte. Bien, innegablemente eso es creatividad, pero no termina ahí.

Aplicado al estudio

Adquirir una buena capacidad creativa nos ayudará en nuestros estudios porque nos enseñará nuevas formas de solucionar problemas, nos abrirá los ojos a formas diferentes de ver las cosas, nos aportará madurez, potenciará nuestra imaginación y nos enseñará a disfrutar de lo que hacemos.

¿Innato o educable?
Es cierto que hay gente que parece tener una creatividad innata. Son mentes distintas y fascinantes capaces de describir el mismo mundo que pisamos el resto como si lo vieran en otros colores que no percibimos los demás. Pero lo cierto es que la creatividad es entrenable. Si añadimos ciertas prácticas a nuestro día a día, todos podemos adquirir esas fascinantes habilidades que nos ayudarán a triunfar en cualquier cosa que nos propongamos.

Técnicas:

   1-Curiosidad: para ser creativos en imprescindible que seamos curiosos. La curiosidad nos ayudará a encontrar nuevas formas de resolver problemas, a ampliar nuestra cultura, a ver el mundo de maneras distintas, etc. Una persona no podrá desarrollar su creatividad si no tiene curiosidad por lo que le rodea, así que debemos, desde hoy, empezar a hacernos preguntas sobre todo lo que nos rodea, por ejemplo: ¿Cómo comenzó?, ¿Quién lo hizo?, ¿se puede desmentir?, ¿A qué sabe?, etc.

   2-Nuevas experiencias: Hay que probar cosas, conocer nuevos sabores y olores, observar distintas culturas, experimentar vivencias diferentes… No hay nada más eficaz para matar nuestra creatividad que vivir una vida sin nuevas sensaciones.

    3-Observar: no podemos y por la calle como zombis, debemos mirar a nuestro alrededor, fijarnos en la gente que nos rodea, en cómo caminan, como visten, si parecen felices o no. Debemos percibir los cambios en las estaciones, la temperatura que hace, los edificios que nos rodean, los grafitis, los colores, la luz. Quizá suene un tanto new age, pero si no somos capaces de “ver” difícilmente seremos capaces de crear.

   4-Tomar apuntes: llevar con nosotros una libreta (o una tableta para los más modernos) es muy eficaz para recordar las ideas que se nos van ocurriendo. No consiste en aspirar a escribir Cien Años de Soledad, sino en rescatar cualquier idea que más tarde pueda sernos útil para desarrollar un trabajo académico o para profundizar sobre ella.

   5-Compartir ideas: discutir sobre nuestros pensamientos y nuestras ideas con otras personas nos ayudará a ver distintos puntos de vista que ampliarán nuestra percepción y nuestra cultura.

  6- Soñar despierto: esta capacidad, por la que generalmente nos regañan, es imprescindible para ayudar a nuestra creatividad. No se trata de quedarse en babia en medio de clase, sino de dedicar algunos momentos al día a imaginar lo que queramos.

  7- Leer: si piensas que no te gusta leer es que aún no has dado con el libro adecuado. Hay que buscar lecturas que nos entretengan y nos aporten cosas, leyendo experimentamos vivencias que jamás podríamos tener en la vida real. Hay que obligarse a leer un rato todos los días.

 8- Abrirse a nuevas ideas: para potenciar nuestra creatividad es imprescindible que dejemos de etiquetar y encasillar a la gente, sus acciones o su manera de pensar simplemente porque sea distinta a la nuestra. Hay que aprender a ver las cosas desde distintos puntos de vista sin que eso signifique que no tengamos ideas propias.

 9- Buscar conexiones: un buen ejercicio es tratar de buscar conexiones entre elementos que aparentemente no tienen nada en común. Aunque generalmente solo se nos ocurran chorradas, es posible que algunas veces puedan surgir ideas interesantes sobre las que nos apetezca profundizar.

 10-Creador de mundos: otro ejercicio que potencia nuestra creatividad y del que pueden salir ideas muy interesantes, es imaginar mundos nuevos. Algo así como un cómic en un planeta distinto, con gravedad diferente o habitantes con necesidades especiales. Imaginemos ese mundo y veamos qué problemas pueden surgir, qué soluciones encajan mejor, etc.

 11-Hacer el tonto: cantar a gritos en la dicha, disfrazarse sin motivo, hacer mezclas absurdas y con la comida, bailar sin preocuparse de hacerlo bien… cualquier proceso de creatividad se verá potenciado por una de estas actividades. Hacer tonterías nos hará sentir bien, nos obligará a crear nuevas formas de divertirnos y nos preparará la mente para enfrentar nuevos retos.