Hemos pasado un mes muy duro, pero ya ha acabado y ahora toca recuperarse de los exámenes y disfrutar de las vacaciones.
La temporada de exámenes es perjudicial para la salud: se pasa estrés, se duerme poco, se come mal, es mentalmente agotadora por la cantidad de materias diferentes que hay que retener y se termina con el cuerpo dolorido de estar tantas horas sentado en la misma postura.
Para resarcir a nuestro cuerpo y nuestra mente de tanto desbarajuste, hay que mimarse un poco ahora que hemos acabado.
Liberar la mente:
1- Celébralo
No hace falta ni decirlo, porque todos estamos deseando pegarnos una buena fiesta cuando acaban los exámenes, pero por si dudabas de su eficacia, premiarnos haciendo algo que nos divierte, tras un mes aburridísimo leyendo apuntes, es muy bueno para nuestra salud mental. No solo nos recompensamos por el duro trabajo, sino que también nos ayuda a distraernos y a desestresarnos.
2-Viaja
Si puedes permitírtelo, sal de tu rutina aunque sea un fin de semana, no hay mejor remedio para nuestro cansado cerebro que pasar unos días junto al mar o en el campo en compañía de quien nos apetezca. No se trata de hacer un viaje paliza del tipo recorrer un nuevo país de punta a punta (lo que es maravilloso, pero muy cansado), sino de desconectar un poco. Y después ya podemos enfrentarnos al viaje paliza o a lo que queramos.
3-Empieza un libro
¿Leer más?, ¿no he leído ya suficiente con todo el temario que he tenido que aprenderme? La respuesta es no. Una cosa es leer y otra estudiar. Tenemos el cerebro sobresaturado de textos larguísimos, aburridos algunos, interesantes otros, pero eso no es literatura. Cuando leemos un libro no tratamos de aprendérnoslo, solo de disfrutarlo. Las imágenes que evocan los libros, el que nuestra imaginación pueda llevarnos a otros lugares, es un alimento esencial para que nuestro cerebro descanse y desaparezca el estrés residual. Es la mejor desconexión.
4-Escucha música
La música que nos gusta nos hace sentir bien porque nuestro cerebro segrega sustancias químicas que nos proporcionan sensaciones de placer y de relajación, así que no subestimes su poder curativo y engánchate a tu MP3.
No te olvides de tu cuerpo:
1-Duerme
Seguramente, durante el último mes hayas llevado un patrón de sueño irregular con noches en blanco, abuso de cafeína y otras sustancias excitantes. Es el momento de devolver el tiempo robado y obligarnos a dormir ocho horas cada día durante una temporada, para que el cuerpo vuelva a acostumbrarse a tener una rutina de horarios de actividades y descanso.
2-Come bien
Otra mala práctica típica en periodo de exámenes es alimentarse mal. A veces incluso engordamos por pasarnos de comidas precocinadas y dulces para calmar la ansiedad. Aquí el problema no está en tener 2 kilos de más, sino en que llevar una mala alimentación nos perjudica la salud y nos drena la energía. Ahora que hemos terminado, es el momento de compensar ese descontrol alimenticio cuidando un poco lo que comemos. Prueba a comer más verduras, ensaladas, fruta y otras ricas recetas veraniegas para recuperar las vitaminas perdidas y pasa por un tiempo de los fritos, los rebozados y las comidas excesivamente grasas. Verás que en muy poco tiempo empiezas a sentirte mucho mejor.
3-Ejercicio
Aunque nos sintamos agotados por haber estado en una silla más de ocho horas al día tenemos que movernos. Es el momento de nadar, salir a pasear o a correr, o hacer el deporte que más nos guste y, como estamos de vacaciones, nos será mucho más fácil poder hacernos una rutina de ejercicio que recupere nuestro cuerpo, y sobre todo nuestra espalda, del exceso al que lo hemos sometido. En poco tiempo nos sentiremos como nuevos y estaremos listos para afrontar el nuevo curso (o los exámenes de septiembre) con ánimos renovados.
¡¡Felices vacaciones a tod@s y cuando acabéis el grado no olvidéis solicitar vuestro e-Título!!