Trabajo de Fin de Grado: cómo elegir el tema

Trabajo de Fin de Grado: cómo elegir el tema

Que el tema para tu Trabajo de Fin de Grado sea bueno va a resultar vital para tu nota, así que innova y disfruta del proceso.

Trabajo de Fin de Grado

Revisa las normas

Lo primero que necesitas es revisar las normas de tu universidad en cuanto al Trabajo de Fin de Grado. Hay algunas que restringen los temas dando un listado y otras que dejan el tema libre, pero, aunque tengas un catálogo cerrado de temas, si tienes una idea relacionada y lo argumentas con tu tutor, normalmente no habrá problemas en que te salgas un poco de las líneas. Entérate bien de qué se pide y cuál debe ser la extensión para que puedas acotar y que no se te vaya de las manos y acabes haciendo algo tan extenso que resulte más apropiado como tesis doctoral que como TFG.

Ten en cuenta al tribunal de evaluación

Si has estudiado Informática pero en realidad te apasiona la Medicina, no te emociones demasiado con eso de que el Trabajo de Fin de Grado es un proyecto propio, porque el tribunal que va a evaluarte sabrá mucho de Informática y nada de Medicina, y son ellos los que ponen las notas. Elige entre los temas relacionados con tu grado, que ya tendrás tiempo en el máster o el doctorado para investigar otras ramas. Aun así, si lo hablas con tu tutor y puedes encontrar un buen asesoramiento, siempre puedes usar tu creatividad para orientar el tema hacia el campo que más te interese, por ejemplo, desarrollando un programa informático que ayude en la evaluación médica.

Te tiene que motivar

Lo más importante de todo (más que la nota final y más que el reconocimiento) es que el tema de tu Trabajo de Fin de Grado te apasione. Vas a invertir cientos de horas en hacerlo y puede suponer una futura orientación laboral, así que no te pongas a trabajar sobre algo que ni te va ni te viene o que directamente no te gusta. Si trabajas sobre un tema que realmente te motive, se notará tanto en el contenido como en la presentación y tu tarea será mucho menos ardua.

Innova

Mira los trabajos de otros años, habla con tus compañeros y diferénciate. No hagas lo mismo que los demás o enfócalo de otra manera. Si quieres que tu TFG destaque, tendrás que innovar y no irte a lo fácil. Y si ves que el tema que más te gusta está muy visto, entonces usa tu curiosidad para profundizar un poco más y descubrir algo relacionado que aún no se haya hecho.

Multidisciplinar

A pesar de que llevan toda la vida encasillándonos en ciencias o letras, esta carrera o la otra, lo cierto es que todas las ramas del saber humano pueden interrelacionarse. El que hayas estudiado Literatura no significa que no puedas recurrir a estudios científicos para validar tus teorías. Por ejemplo, si vas a tratar la obra de cierto autor, puedes recurrir a la Historia para hablar de cómo su entorno cultural y social pudieron influir en sus escritos; puedes recurrir a la Estadística para conocer la repercusión de su obra o a la Medicina y la Psiquiatría para explicar cómo ciertas patologías físicas o mentales pudieron intervenir en su proceso creativo. La cuestión es ahondar más profundamente en un tema sin renunciar a ninguna ayuda y así tu Trabajo de Fin de Grado se enriquecerá.

Tipo de investigación

Una vez que tengas unos cuantos temas en mente (quédate con los tres que más te gusten y descarta el resto) tendrás que ver qué tipo de investigación vas a querer realizar, si más bien será una comparación bibliográfica o vas a hacer tu propio estudio científico. Recuerda siempre la extensión de tu trabajo y el cálculo realista de horas que podrás dedicarle, para que, cuando te decidas por una u otra opción (o por una mezcla de ambas), puedas valorar los recursos de los que dispondrás y así decantarte por un tema o por otro.

Pide consejo

Habla con tus compañeros, amigos, familiares y tu tutor. Hazles un breve resumen de los tres temas finalistas y escucha sus consejos. Si lo que te dicen se ajusta a tus preferencias, ya tienes tema: el que os gusta a la mayoría. Y si lo que te dicen no se ajusta a lo que te está diciendo tu corazón, ya tienes tema: aquel al que te niegas a renunciar. Y sí, aunque la decisión en uno u otro caso la estás tomando tú, es muy bueno exponer en alto y oírte explicar a otros lo que está en tu cabeza, porque eso puede orientarte y darte nuevas ideas.

Y si los otros temas que tienes en mente también te gustan, no olvides que, una vez que tengas tu eTítulo, puedes usarlos en tu TFM o en tu doctorado.