Si las cosas no han salido tan bien como querías en tus exámenes de selectividad, no desesperes, hay formas de subir tu nota y cursar tu carrera soñada.
Todos los años, miles de alumnos se enfrentan a la selectividad llenos de nervios, de dudas y de esperanzas. Desgraciadamente, las cosas no siempre salen como uno quiere, pero eso no significa que nos tengamos que conformar con estudiar algo que no nos gusta.
Vamos a ver qué opciones tenemos:
Si suspendimos
Si hemos suspendido la primera convocatoria de selectividad, podemos pasar el verano preparando el acceso y volver a presentarnos en septiembre con las cosas un poco más claras. Además, los nervios estarán más controlados porque ya sabemos cómo será el examen.
Hay que organizarse bien y ponerse un horario fijo de estudio para que en septiembre lo llevemos todo bien preparado. Con tres meses de preparación, tendremos tiempo para estudiar a otro ritmo (un par de horas al día cinco días por semana será más que suficiente). Es un buen momento para probar otras técnicas de estudio y para hacer muchos exámenes de selectividad. Recuerda que las universidades suben a internet todos los exámenes de años pasados y que hacer exámenes siempre es la mejor técnica de estudio que puedes usar.
Si hemos aprobado pero la nota no es suficiente
Lo primero que debemos hacer es informarnos bien de las notas de corte de todas las universidades en las que se imparta el grado que nos interesa. Hay que tener en cuenta que las notas de corte varían según las comunidades autónomas y las universidades. Puede que no necesitemos subir nota, solo contemplar otras posibilidades. Podemos hacer el primer año en otra comunidad o en una universidad privada y luego pedir un traslado de expediente o simplemente dejar nuestra zona de confort y adentrarnos en lo desconocido, ¡qué aventura!
Si necesitásemos más puntos para estudiar lo que queremos, siempre podemos presentarnos en septiembre para subir nota; realizar de nuevo la fase general, la específica o ambas, e incluso cambiar asignaturas, pero no coger asignaturas sueltas de la fase general. Y además, es imposible que nos baje la nota, porque siempre se guardará la del examen que obtuvo mayor puntuación.
Si optamos a un ciclo superior
Si optamos por hacernos un ciclo de formación profesional para acceder a la carrera que nos gusta una vez que obtengamos el título, la nota de acceso será la nota media del ciclo, así que esta también es una opción que plantearse porque habrá incluso asignaturas que se puedan convalidar y ganaremos en experiencia técnica a los compañeros que hayan accedido directamente. Además, si de nuevo la media del ciclo superior no nos alcanza, podremos hacer la parte específica de la EvAU o EBAU para subir la nota.
Si queremos presentarnos hasta que salga perfecto
Antes había cuatro convocatorias para acceder a la universidad y se acabó, pero con la EBAU, se elimina ese límite, así que podemos estar tranquilos porque podremos presentarnos todas las veces que queramos.
Lo importante es poder elegir la carrera que más nos gusta para que luego no nos encontremos frustrados cursando unos estudios que no nos apasionan y teniendo que decidir si cambiamos a mitad de curso.
Conseguir el eTítulo de la carrera de nuestros sueños es lo más gratificante que hay; así que lo importante es no rendirse, estudiar mucho y seguir nuestros consejos en el blog para que podamos ayudarte.
¡Mucha suerte!