Comienzan las clases otro año más y hay 5 cosas que no te pueden faltar para triunfar en el nuevo curso. Te las contamos para que no empieces sin ellas.
Motivación
Un ingrediente que no puede faltar al empezar este nuevo curso es la motivación. Cada persona tiene que encontrar la suya, y hacerlo será imprescindible para que terminemos la carrera y obtengamos el eTítulo que nos dará acceso al trabajo de nuestros sueños.
Hay que concienciarse de que habrá asignaturas que odiemos y momentos en los que nos den ganas de tirar la toalla, pero si somos capaces de encontrar una motivación en la meta, en nuestra profesión futura, en pasarle el título por la cara a nuestro hermano el perfecto o en lo que nos dé la gana, ese será el empujón que necesitemos para seguir adelante otro curso más y los que estén por venir.
Al empezar el curso es fácil encontrar esa motivación, pero si no prestamos atención a las causas que nos hacen ilusionarnos por lo que estamos estudiando, cuando lleguemos al ecuador del curso puede que ya ni nos acordemos.
Por eso es importante que ahora, cuando aún estamos frescos, enumeremos todas aquellas cosas que nos gustan de nuestra futura profesión, las cosas que nos interesan del grado, nuestras metas a corto, medio y largo plazo y hagamos una lista que nos sirva de recordatorio y de motor para continuar.
Autocuidados
Dedicarnos tiempo a nosotros y a nuestro bienestar es saludable. Durante las vacaciones es probable que hayamos participado en varias actividades que nos han hecho sentir felices y no debemos abandonarlas del todo solo por que empiece el curso.
Por ejemplo, el deporte es esencial para mantener un buen equilibrio, así que no hay que abandonar las actividades deportivas durante el curso. De hecho, si no practicamos deporte con regularidad, este es un momento buenísimo para empezar.
Si nos aseguramos una actividad física antes o después de clase, estaremos más sanos, más concentrados y felices. Rendiremos mejor y también nos sentiremos mejor con nosotros mismos. El deporte estimula nuestra concentración y nos ayuda a relajarnos durante las horas que tengamos que permanecer sentados en clase. En época de exámenes reducirá notablemente nuestro estrés.
Apostar por la organización
Tener una buena organización es imprescindible para sacar el curso con éxito y, por eso, no puede convertirse en uno de esos propósitos de nuevo curso que se olvidan dos días después.
Necesitamos planificar y organizar y, para eso, lo mejor es tener una agenda y USARLA, claro. Sí, esa es la mala noticia, con comprarla o descargarla no vale, también hay que rellenarla y mantenerla al día.
A todos nos suena eso de «aún falta mucho para la fecha de entrega del trabajo» o «todavía tengo tiempo de sobra para estudiar» y la horrible sensación de darse cuenta de que habíamos sobreestimado la duración de las semanas y que las fechas se nos han echado encima.
Bien, pues todo eso se soluciona con una agenda y, mejor aún si añadimos un calendario bien visible en nuestra pared.
Llevar un orden y hacer una buena planificación y gestión del tiempo nos va a ayudar muchísimo a lo largo de toda la carrera a reducir el estrés y a tener un control real sobre nuestros estudios.
Empezar el curso con el nido hecho
Diseñar nuestro propio espacio de estudio, crear un lugar para nosotros que sólo utilicemos para estudiar y decorarlo como queramos es una gran actividad para empezar el curso. Incluso si ya tenemos ese espacio de antes porque no hemos tenido que mudarnos, es positivo darle una vuelta e introducir algunos cambios que nos hagan sentir mejor, más cómodos y motivados.
Si creamos un sitio en el que nos sintamos a gusto, con una buena iluminación, una mesa amplia y una silla confortable, nos será menos pesado tener que pasar las horas allí. Un espacio propio, aunque sea dentro de la casa de nuestros padres, hará que nos concentremos mejor y que pasemos más tiempo estudiando.
Aprovechar los últimos días de vacaciones para confeccionar ese lugar o para mejorar el que ya teníamos puede ayudarnos para ir mentalizándonos sobre que el nuevo curso va a empezar.
Nuevo curso, nuevos apuntes
Aquí hemos hablado varias veces de lo importantísimo que es tomar apuntes para sacar la carrera. Tener unos buenos apuntes nos ahorrará muchas horas de estudio y de agobios, solo hay que renunciar a pasar la clase charlando con el compañero o mirando las redes sociales y ponernos a escribir.
En realidad, no es tan complicado porque el móvil lo podemos consultar después, con el compañero se puede quedar tras acabar las clases y, con el profesor…, generalmente no. Solo tenemos ese momento para aprovechar el tiempo.
Para tomar apuntes, varios estudios han demostrado que lo mejor es escribir a mano. Aunque suene atrasado y el portátil mole más, resulta que la escritura manual tiene relación directa con nuestro almacenamiento de memoria, por lo que recordaremos mucho mejor lo escrito que lo tecleado.
Si queremos que tomar apuntes nos sirva de verdad y no ir a clase simplemente a calentar el asiento, entonces debemos coger papel y boli y ponernos manos a la obra.