Con el método PQ4R seremos capaces de, en menos tiempo, memorizar mejor, comprender bien todo lo que leemos y fijar nuestros conocimientos a largo plazo.
Cambiar de hábitos
La universidad exige mucho de nosotros y nos hace enfrentarnos a nuevos retos para que podamos, al final, conseguir nuestro eTítulo universitario. Aquí ya no basta con preparar los exámenes leyendo una y otra vez el temario hasta memorizarlo, porque ahora los temarios son demasiado extensos y, con una técnica de estudio tan poco eficiente, resultarían inabarcables.
Hay que salir de lo malo conocido y arriesgarse con otras técnicas que no solo nos faciliten el aprendizaje, sino que también reduzcan la cantidad de horas que pasaremos preparando los exámenes.
Una de esas técnicas es la conocida como el método PQ4R, que es un acrónimo de preview, question, read, reflect, recite and review. Es decir, que esta técnica se divide en 6 pasos que son: vista previa, preguntar, leer, reflexionar, recitar y revisar.
Método PQ4R
En realidad, esta técnica de estudio no inventa nada nuevo, pero aglutina otras técnicas eficaces y sistematiza el proceso.
Quizá su punto fuerte es que reduce significativamente el tiempo de estudio y, sobre todo, que ayuda al aprendizaje.
Usando esta técnica de estudio vamos a memorizar los temarios más rápidamente y, además, nos los vamos a aprender más allá del examen porque el método PQ4R potencia que los conocimientos se asienten en la memoria a largo plazo, ya que, a lo largo de sus 6 pasos, usaremos distintas áreas de nuestro cerebro y en cada uno de los pasos iremos potenciando la memoria visual, la auditiva e incluso la cinestésica.
Partes del método PQ4R
Con el método PQ4R vamos a dividir el estudio en 6 partes diferentes. Veámoslas una por una:
Vista previa (preview): Este es el primer paso y solo dura unos pocos minutos. No hay que alargarse. Consiste en hacer una lectura rápida en la que identifiquemos los puntos importantes para que nos podamos hacer una idea general del contenido.
Para ello, buscaremos los títulos y subtítulos del texto o los primeros párrafos y los últimos, que son los lugares en los que podemos buscar las ideas principales. Podemos tomar notas o subrayar con un código de color, pero no debemos perder tiempo en hacer algo trabajado. Esto solo es escanear el texto, leer por encima para tener una idea inicial.
Preguntar (question): En una hoja de papel, debemos anotar una serie de preguntas básicas que le hacemos al texto. Podemos empezar por quién, qué, cómo, cuándo, dónde, por qué y seguir con cosas más complejas relacionadas con el tema como qué esperamos aprender en él o qué sabemos de antemano.
Lo bueno de este paso es que, una vez que nos acostumbremos al método PQ4R, podremos tener la mayoría de las preguntas redactadas de antemano.
Leer (read): En esta siguiente lectura ya hay que profundizar y hacer una lectura comprensiva. No debemos tratar de abarcarlo todo, sino de ir haciendo un trabajo activo sección a sección. Hay que buscar las respuestas a las preguntas que nos hemos formulado en cada uno de los apartados e ir tomando notas de todo.
De esta forma no leemos de forma pasiva el texto, sino que somos nosotros los que, activamente, nos enfocamos en investigar y encontrar las respuestas. Así, lo que encontramos se fija en la memoria a largo plazo y podemos considerar que llevamos a cabo un aprendizaje mucho más completo.
Reflexionar (reflect): Ahora se trata de constatar que hemos respondido a todas las preguntas y de volver atrás si se nos ha quedado alguna. Es posible que no todas las preguntas que nos hacemos tengan respuesta, pero también es posible que algo se nos haya pasado.
En este apartado, como su propio nombre indica, hay que «reflexionar» acerca del propio texto que hemos leído tratando de relacionarlo con otros conocimientos que ya tuviéramos previamente o con otras lecciones anteriores. ¿Vemos errores, inconsistencias o contradicciones? ¿Hay alguna información que podríamos ampliar?
De ser así, hay que repasar los puntos que pudieran estar en contradicción e intentar encontrar dónde está el fallo y, si vemos que podemos ampliar la información buscando en otros textos, debemos hacerlo para contestar a nuestras preguntas de la forma más completa posible.
Este punto es fundamental para comprender en profundidad la materia que cursamos y también para desarrollar una mente crítica y aprender a pensar desde distintos ángulos.
Recitar (recite): Este punto sirve para memorizar usando para ello nuestro oído. Ya se ha constatado en decenas de estudios científicos la relación que hay entre la memoria y la audición y lo positivo que resulta estudiar en voz alta. Más aún si, siguiendo los consejos del método PQ4R, en vez de simplemente leer y recitar en voz alta, lo hacemos usando nuestras propias palabras, mucho mejor.
Este apartado aconseja la colaboración grupal para que los conocimientos de cada uno de los miembros puedan explicarse y debatirse. Resultará muy positivo que formemos un grupo de estudio en el que cada uno de los miembros pueda exponer ante los demás lo aprendido y que luego se discuta la información colaborativamente. Además, toda información ampliada servirá también para enriquecer el conocimiento del grupo a través de los debates.
Revisar (review): El paso final sirve para reforzar el aprendizaje y consiste en certificar que no nos hemos dejado nada en el tintero. Cumplidos los pasos anteriores, este nos permite asegurarnos de que tenemos toda la materia controlada, que están todas las preguntas respondidas y que somos capaces de explicar cualquier punto sin duda. También nos permite hacer resúmenes o fichas de estudio muy simplificados en los que abarquemos todo.