Llega la Navidad y hay que aprovechar para divertirse, pero también para estudiar un poco. Te contamos cómo hacerlo todo sin agobios.
Optimismo
La Navidad se pasa muy pronto y menos mal, porque nadie en su sano juicio soportaría tres meses seguidos de villancicos, comilonas y gastos monumentales. Lo que pasa es que tendemos al optimismo y cuando empiezan las vacaciones nos creemos que son más largas de lo que realmente son y empezamos con eso de «ya me pongo a estudiar la semana que viene» y terminamos con eso de «¡Uy! ¡Se me han pasado las fiestas sin hacer nada!».
Para evitar esto y que podamos disfrutar de la Navidad al mismo tiempo que nos ponemos al día con los estudios, lo único que tenemos que conseguir es ser un poquito disciplinados y organizarnos bien.
Sigue un horario
Si te acostumbras a estudiar un par de horas diarias desde el primer día, cuando acaben las fiestas tendrás todo el temario revisado y habrás podido profundizar en las materias que te resulten más complicadas e incluso adelantar algún trabajo. Es una cuestión de voluntad; con un poquito que pongas de tu parte, podrás hacerlo.
Sin perder el tiempo
Eso sí, nada de sentarse a estudiar y perder la mitad del tiempo con el teléfono o jugando al Candy Crush, porque, como ya sabemos, calentar el asiento no cuenta como tiempo de estudio. Esas dos horas diarias tienes que aprovecharlas bien y rendir al máximo, por eso es recomendable que mantengas un horario constante (es decir, que uses cada día las mismas dos horas) para que tu cerebro se acostumbre a centrarse durante ese rato en la tarea.
Disfruta de las fiestas
Y ya que estamos en Navidad, queramos o no, aprovecha el resto de horas libres al día para divertirte y pasar tiempo con tu gente. Pronto van a venir los exámenes del primer cuatrimestre y entraremos en época de clausura, estrés y aburrimiento total (que es el precio a pagar si queremos conseguir nuestro preciado eTítulo), así que ahora toca desfogar, relajarnos y ponernos hasta arriba de turrón.
¡Felices fiestas y vacaciones a tod@s!