Celebra el día del libro como te mereces: disfrutando de leer
23 Abr 2023

Celebra el día del libro como te mereces: disfrutando de leer

¿Hace cuánto que no te das el gusto de comprar un libro? Si la respuesta no es justo ayer, entonces recuerda que hoy es el Día del Libro. Aprovecha.

Día del libro

¿Qué se celebra el Día del Libro?

El Día Internacional del Libro se celebra el 23 de abril porque, en teoría, Cervantes, Shakespeare y el Inca Garcilaso de la Vega murieron el 23 de abril de 1616, cosa que solo resultó ser cierta en el caso de este último. Pero no vamos a dejar de festejar tan maravilloso día solo porque la Unión Internacional de Editores y la Unesco no contrastaran bien la información de tan ilustres decesos. La cosa es que murieran en la fecha que murieran, todos ellos y muchos otros han dejado, dejan y dejarán un legado inmortal de obras de arte que se merecen una celebración por todo lo alto.

Hoy tómate un descanso para disfrutar de la lectura

Sabemos que estás agobiado con el esprint final para aprobar el curso, que los profesores han mandado 500 lecturas recomendadas y que si estás con el TFG, ya casi sientes que te sangran los ojos de tanto leer, pero precisamente por eso tienes que leer hoy y relajarte un rato.

¿Te parece absurdo leer para descansar de la lectura? Pues no lo es. Verás, leer es algo que hacemos constantemente: leemos lo que vemos en redes sociales, leemos los apuntes que tomamos en clase, leemos los carteles por la calle, los whatsapps que nos llegan, e-mails, subtítulos de la serie que nos gusta… Nos pasamos el día leyendo, pero pocas veces nos paramos a disfrutarlo. Y hay que recordar que leer es uno de los mayores placeres de la vida. Por eso, celebra tu día del libro leyendo algo que no necesites leer, sino que quieras leer. Escoge algo de tu autor favorito o de uno que no conozcas y sumérgete en un mundo diferente por un día. Permítete viajar y desconectarte un rato de la realidad y sus agobios y disfruta.

Planifica una cita contigo mismo en el Día del Libro

Para festejar el Día del Libro como se merece, te recomendamos que te levantes a una hora razonable y que salgas a pasear. Visita los puestos y librerías que abrirán siempre en este día tan señalado y escoge tu libro. Luego ve a un parque, a una cafetería o a donde tú quieras y desconecta el teléfono. Abre el libro, huélelo, siente el tacto del papel entre tus dedos y comienza a leer. Tras este día de tranquilidad habrás reducido tu estrés y te sentirás más fuerte y motivado para seguir adelante con las agotadoras rutinas diarias, porque sí, porque dedicarnos tiempo a nosotros mismos y leer una buena novela es lo mejor que hay para recargarnos la pila que tan gastada está ya a estas alturas.

¿Y por qué HAY que leer?

Porque somos humanos. Punto. Leer y escribir nos hacen únicos como especie. Un topo excava unos 5 metros de tierra por hora, el pez vela supera los 80 km hora nadando, la nutria usa piedras como herramientas para sumergirse en el agua y para romper los moluscos que come. ¿Te imaginas un topo que no supiera excavar, un pez que no pudiera nadar o una nutria que no supiera usar herramientas para comer? Nosotros, los seres humanos, no tenemos más predadores que los virus, así que una persona analfabeta no va a morir de hambre en nuestra sociedad (menos mal). Pero sí es una verdadera tragedia que alguien se pierda algo tan nuestro, tan humano, tan esencial.

No vayas en contra de tu naturaleza

En nuestra sociedad, leer literatura no tiene nada que ver con sobrevivir, pero sí con nuestro desarrollo personal. Ser humano, ser persona, tiene relación directa con nuestra cultura (no solo literaria, también oral, musical, pictórica, escultórica, social, etc.), con la visión que tenemos del mundo, con lo abierta o cerrada que esté nuestra mente, con cómo usamos el lenguaje o cómo construimos nuestros pensamientos. Leer es esencial para ese desarrollo y como estudiantes debemos entender que no podemos limitar nuestras lecturas a lo obligatorio, a lo automático; porque sí, es posible que ciñéndonos a eso consigamos nuestro soñado eTítulo y un buen trabajo, pero no habremos abarcado todo lo que podríamos abarcar.

Una persona que no lee es igualmente una persona, pero estará más vacía, tendrá menos cultura general y será más infeliz, y eso es precisamente lo que hay que celebrar el Día del Libro: la felicidad de poder leer, de ser humanos.

¡Feliz Día del Libro a tod@s, que lo disfrutéis!

 

¿A qué quiero dedicarme en el futuro? Cómo elegir tu profesión
19 Abr 2023

¿A qué quiero dedicarme en el futuro? Cómo elegir tu profesión

Llegó el momento de elegir estudios para poder dedicarnos a la profesión que más nos guste. ¿Cómo acertar? ¿Qué cuestiones debemos tener en cuenta?

profesión

Los que no nacieron con el chip de la vocación integrado

Ya nos han ido preparando durante todo el bachillerato, pero mientras algunas personas tienen muy clara cuál es su profesión soñada desde que iban a primaria y cuál es la carrera que deben estudiar, otras, menos afortunadas, se enfrentan a la EBAU aún con muchas dudas. ¿Qué quiero estudiar? ¿A qué quiero dedicarme? ¿Dónde me veo en unos años? Lo que me gusta ¿tiene salidas profesionales?

Elegir una profesión es una decisión importante que puede tener un impacto muy significativo en nuestras vidas. Veamos qué podemos hacer para facilitarnos la decisión y que podamos encontrar una carrera que nos dé el eTítulo necesario para recorrer el camino profesional que mejor se adapte a nuestros intereses y habilidades.

Un rato de introspección

Antes de comenzar a buscar carreras, es importante que nos conozcamos a nosotros mismos. Debemos preguntarnos qué nos apasiona, qué nos motiva y en qué somos buenos. Ver cuáles son nuestras fortalezas y nuestras debilidades tanto en nuestra personalidad como cara a los estudios. Debemos evaluar cuáles son nuestras habilidades, intereses y personalidad.

Podemos preguntarnos ¿en qué destaco? ¿Qué me gusta hacer? ¿Cuáles son mis valores? ¿Dónde me veo en unos años? ¿Qué creo que será importante para mí en el futuro?

Si tenemos dificultades para responder estas preguntas, podemos realizar pruebas de personalidad o habilidades, hablar con familiares y amigos cercanos o incluso pedir ayuda a un consejero vocacional.

Por ahora no hay que orientar esos pensamientos hacia lo profesional o ni siquiera hacia los grados universitarios. Lo que debemos es pensar en cómo somos nosotros. Hay que mirar primero hacia adentro, que ya vendrá lo demás.

Ahora vamos a por las carreras

Una vez que sepamos cuáles son nuestros intereses y habilidades, debemos comenzar a investigar acerca de las carreras que nos interesan. Busquemos información sobre los requisitos educativos, las habilidades y competencias necesarias, las oportunidades de empleo y las perspectivas de futuro de la carrera.

También es importante que investiguemos sobre las diferentes especializaciones dentro de una carrera, ya que esto puede influir en nuestra elección.

Otras cuestiones en las que debemos pararnos a pensar son las metas a largo plazo que esperamos conseguir con nuestra profesión. Cabe preguntarse, por lo tanto, cosas como ¿qué quiero lograr en mi carrera? ¿Quiero ganar mucho dinero? ¿Me gustaría que mi trabajo sirviera para crear un mundo mejor? ¿Es importante para mí tener un buen equilibrio entre vida laboral y personal?

Los profesionales saben cosas que Google no nos cuenta

Hablar con profesionales que trabajan en el campo que nos interesa es una excelente manera de obtener información de primera mano sobre lo que implica la carrera y las habilidades que necesitaremos. Debemos preguntarles sobre las responsabilidades laborales, las perspectivas de empleo, los requisitos educativos y las oportunidades de crecimiento profesional.

Además, también nos pueden informar de cómo de saturado está el sector, de qué otras formaciones complementarias podrían ayudarnos a tener un trabajo mejor o más estable en el futuro, de qué empresas contratan más u ofrecen mejores condiciones y de muchos otros asuntos.

No hay que agobiarse, encontrar profesionales a los que entrevistar es más sencillo de lo que parece; podemos encontrarlos a través de LinkedIn, asistir a ferias de empleo y eventos relacionados con la carrera que nos interesa, hacer una búsqueda de empresas y pasarnos a preguntar si alguien podría dedicarnos unos minutos, ver si alguien de nuestra familia conoce a alguien que…

No todo es vocación, también hay que valorar las salidas 

Antes de tomar una decisión, es importante que valoremos las oportunidades de encontrar trabajo de la carrera que hemos elegido. Debemos investigar sobre las tendencias de empleo en nuestro lugar de residencia y considerar las perspectivas de crecimiento y estabilidad laboral. Vamos, que nos aseguremos de que podamos estudiar para desarrollar la profesión que elijamos y no para hacer cualquier otra cosa que no nos guste.

La vocación es muy importante, pero si hemos llegado hasta aquí sin tener muy claro a qué queremos dedicarnos es que tampoco nos ha movido una pasión concreta y podemos abrir el campo de opciones.

Es recomendable asegurarse de que la carrera que nos interese tenga buenas perspectivas de empleo y que vayamos a tener la oportunidad de realizar la profesión que nos guste.

Investigar la demanda del mercado laboral en el campo que nos interesa y verificar las tasas de empleo, su proyección en el futuro y el salario promedio es buena idea y aunque estos no son los únicos factores que considerar, la demanda laboral puede ayudarnos a tomar una decisión más informada.

Otros factores que tener en cuenta: la ubicación y el coste

La ubicación geográfica también es un factor importante que debemos considerar al elegir una carrera. Si preferimos vivir en una ciudad o en el campo, o si tenemos la intención de mudarnos a otro país en algún momento, hay tener en cuenta cómo afectará a nuestra carrera.

También sería bueno investigar sobre las oportunidades de trabajo en la ubicación que nos interesa y considerar cómo puede afectar nuestras perspectivas de empleo y nuestra calidad de vida.

Por otro lado, hay que ver lo que nos van a costar nuestros estudios, si vamos a ir a una universidad pública o privada, si tendremos opción a beca porque cumplimos con los requisitos, etc.

No nos apresuremos en tomar una decisión

La elección de una carrera es una decisión importante que no debe tratarse a la ligera. No pasa nada por darse el tiempo necesario. Para mucha gente incluso es necesario tomarse un gap year o año sabático para aprender más cosas y poder tomar una buena decisión. Es nuestro futuro y debemos pensar bien en todas las opciones.

Tampoco debemos tener miedo a equivocarnos o a cambiar de dirección llegado el momento. La elección de una carrera no es para siempre. No es algo absolutamente definitivo. Si después de algunos años descubrimos que nuestra elección no nos hace felices, podemos cambiar el rumbo. Las habilidades y la experiencia que habremos adquirido serán aplicables en muchas otras áreas y tendremos una experiencia y conocimientos diferentes a nuestros nuevos compañeros, lo que será sin duda una ventaja.

 

 

Las tecnologías y herramientas ‘online’ más útiles para estudiantes
16 Abr 2023

Las tecnologías y herramientas ‘online’ más útiles para estudiantes

Podemos estudiar de forma más eficiente, abarcar más contenidos con menos esfuerzo y organizarnos mejor gracias a las nuevas tecnologías.

tecnologías

Las nuevas tecnologías y las herramientas online se han convertido en un recurso imprescindible para el aprendizaje; sobre todo, cuando estudiamos en la universidad y queremos sacar nuestro eTítulo sin complicaciones.

Gracias a los avances en tecnología, ahora tenemos acceso a gran cantidad de recursos que nos ayudan a aprender de una forma mucho más eficiente, a tener acceso rápido a cualquier contenido, consejos para llevar un orden, herramientas para hacer bibliografías, la posibilidad de conseguir ayuda con la redacción de contenidos…

Toda herramienta tiene su utilidad, y cuantas más conozcamos y más familiarizados estemos con su uso, mucho más sencillo será sacarles partido en nuestro beneficio.

Plataformas de aprendizaje universitarias

Aunque sea menos glamuroso que otras tecnologías más novedosas, familiarizarse con las plataformas de aprendizaje en línea de nuestra propia universidad es una gran idea. Hay que pensar que estas plataformas están diseñadas ex profeso para el estudio universitario y suelen ser muy completas y ofrecer una gran cantidad de recursos y herramientas que pueden ser de gran ayuda.

Es cierto que no suelen tener un diseño atractivo ni una navegación muy intuitiva —en eso suspenden la mayoría de ellas—, aunque sí son fáciles de usar y en ellas se pueden encontrar lecturas, ejercicios, vídeos, foros de discusión y exámenes online para que podamos practicar.

ChatGPT y otras IA

Hablamos hace pocas semanas de esta IA revolucionaria que lo mismo puede traducirnos un ensayo del chino mandarín que redactarnos un trabajo académico muy vistoso.

Como herramienta, ChatGPT es utilísima; como sustituto de nuestro cerebro es fatal. Hay que tener cuidado con cómo se usan estas tecnologías tan potentes porque nos pueden hacer suspender y que olvidemos cómo se trabaja sin ellas, pero mientras lo hagamos bien y antes de que gobiernen el mundo e intenten matarnos, las IA son herramientas impresionantes.

Redes sociales

Es posible que las redes sociales, o el mal uso que hacemos de ellas, hayan contribuido a crear un mundo peor y al auge de ciertos problemas psicológicos que antes no eran tan comunes.

Sin embargo, bien usadas, las redes sociales son herramientas de comunicación fantásticas para poder para compartir información y conocimientos con otros estudiantes y profesores. Estas tecnologías nos permiten crear grupos, por ejemplo, en Facebook o LinkedIn, que estén relacionados con nuestra área de estudio, mediante los que crear una comunidad de estudiantes y profesionales con intereses similares, que sirva tanto para hacer networking como para ampliar la formación y recursos de forma colaborativa.

Tecnologías que ayudan a organizarse

Salvo que seamos unos máquinas en eso de recordar fechas y llevar todo al día, e incluso así, porque los seres humanos somos falibles, recurrir a apps que nos ayuden a llevar un orden adecuado y a tener al día nuestros quehaceres es una gran idea.

Cuando se juntan varias cosas es fácil despistarse; hay muchas herramientas tecnológicas útiles para que los estudiantes podamos llevar todo al día, no olvidar ninguna fecha, priorizar las tareas diarias, evitar perder la concentración mientras estudiamos, etc.

Escribir bien es importante

Y ahora, la tecnología nos ayuda. Evidentemente, los correctores de texto son esenciales porque a todos se nos puede escapar una falta de ortografía o tener una errata, pero no solo es importante que algo esté escrito con corrección, sino que también debe estar bien escrito, ser comprensible para todo el mundo y, en la medida de lo posible, ameno. Hay varias herramientas online que nos dicen cómo redactar mejor, por ejemplo el sistema arText , que ayuda a crear textos claros y bien redactados.

Además, también es importante evitar el plagio, y ya hay programas accesibles para todos en línea que nos dirán si nuestros escritos pasan el filtro o no. Conviene tener en cuenta que estas herramientas también las tienen los profesores y puede que nos hayamos pasado con las citas literales.

 Cursos online y moocs

Sean gratuitos, como los moocs, o de pago, los cursos online nos permitirán adquirir una serie de conocimientos extras que nos ayudarán mucho, tanto para comprender con mayor profundidad nuestra rama del conocimiento como para destacar en clase y subir nuestras notas.

Hay una gran cantidad de cursos en línea gratuitos y de pago que cubren una amplia variedad de temas y habilidades. No perdamos la oportunidad de hacer al menos un par de cursos al año. Incluso podemos hacerlos en verano si nos vemos muy agobiados de tareas.

Los riesgos de las nuevas tecnologías

Las tecnologías son maravillosas y nos facilitan la vida. No debemos tenerles miedo, pero sí hay que saber usarlas con cabeza y proteger nuestros datos personales, nuestra seguridad e intimidad. Es importante tomar las medidas necesarias para protegernos, especialmente cuando se trata de compartir información personal o financiera en línea. Hay que asegurarse de usar contraseñas seguras, de no compartir información personal en sitios no seguros y de estar atentos a posibles amenazas de seguridad.

Por lo demás, ¡vivan las nuevas tecnologías y lo mucho que nos ayudan!

Cómo reducir el estrés y la ansiedad al estudiar
5 Abr 2023

Cómo reducir el estrés y la ansiedad al estudiar

Mucho se habla del problema de estrés y ansiedad que sufren los estudiantes y poco se hace para arreglarlo. Veamos cómo mejorar esta situación.

el estrés y la ansiedad

Nos encontramos en una época en la que el estrés y la ansiedad son dos factores que afectan en gran medida a la vida de los estudiantes universitarios. La preparación de exámenes, la entrega de trabajos y la acumulación de tareas pueden generar un nivel de estrés muy elevado, lo que puede afectar negativamente el desempeño académico y la salud en general.

La vida académica es estresante y cuando se junta con una situación social incierta o problemas personales, la presión puede ser insoportable.

Nadie puede hacer que todo vaya bien, pero sí podemos hacer que lo que pase nos afecte en su justa medida y aprender a cuidarnos como es debido. El tiempo que pasamos en la universidad hasta conseguir nuestro eTítulo es una valiosa preparación para la vida adulta, y si aprendemos a gestionar bien los sentimientos aversivos, nos estaremos asegurando una buena vida.

Por ello, es importante contar con técnicas que nos permitan reducir estos niveles de estrés y ansiedad. Veamos a continuación algunas de las técnicas más efectivas:

Planificación y organización

Una buena planificación y organización de las tareas puede ser de gran ayuda para reducir el estrés y la ansiedad. En este sentido, es importante tener en cuenta los plazos de entrega de los trabajos y exámenes, así como la carga de trabajo que se tiene para cada asignatura.

Una buena forma de organizarnos es mediante la creación de un calendario en el que anotemos todas las fechas importantes, para que podamos visualizar claramente todo lo que tenemos que hacer y en qué momento. De esta manera no se nos echará el tiempo encima y no nos encontraremos estudiando a última hora con palpitaciones y sudor en la frente.

Técnicas de respiración

Las técnicas de respiración son una forma muy efectiva de reducir el estrés y la ansiedad. Una de las técnicas más sencillas es la respiración profunda, en la que se inhala profundamente por la nariz, se retiene la respiración durante unos segundos y luego se exhala lentamente por la boca. Realizar esta técnica durante unos minutos puede ayudarnos a relajarnos y a concentrarnos mejor.

Y esta técnica no solo sirve para cuando ya estemos al borde de la hiperventilación, sino que podemos aprender a usarla siempre antes de estudiar y antes de los exámenes para alcanzar un nivel de tranquilidad y oxigenación óptimos.

Meditación

La meditación es otra técnica con eficacia demostrada para reducir el estrés y la ansiedad. Se trata de un proceso en el que se busca concentrarse en el momento presente y en la respiración, lo que nos ayudará a liberar la mente de pensamientos negativos y a mejorar la capacidad de concentración.

Existen diferentes técnicas de meditación, como la meditación guiada o la meditación mindfulness, y es importante encontrar la que mejor se adapte a nuestras necesidades.

Ejercicio físico

El ejercicio físico es una de las formas más efectivas de reducir el estrés y la ansiedad. Al realizar ejercicio, nuestro cuerpo libera endorfinas, que son sustancias químicas que nos hacen sentir bien.

Además, el ejercicio puede ayudarnos a despejar la mente y a mejorar nuestra capacidad de concentración. Por ello, es recomendable realizar al menos 30 minutos de ejercicio al día, ya sea caminando, corriendo o practicando alguna actividad física que nos guste.

Alimentación saludable

La alimentación también puede influir en nuestros niveles de estrés y ansiedad. Consumir alimentos ricos en nutrientes como frutas, verduras y proteínas magras puede ayudarnos a mejorar nuestra salud en general, lo que a su vez nos ayudará a sentirnos mejor. Por otro lado, es importante evitar el consumo de alimentos procesados y no tomar estimulantes que puedan alterarnos.

El descanso adecuado

El descanso es fundamental para todo. Cuando dormimos, nuestro cuerpo se recupera y se regenera, lo que nos ayuda a estar más relajados y a tener más energía para afrontar los retos del día siguiente.

Es recomendable dormir al menos 7-8 horas diarias para asegurarnos de que nuestro cuerpo y nuestra mente se recuperen adecuadamente. Además, es importante establecer una rutina de sueño para acostumbrarnos a dormir y despertar en los mismos horarios.

Establecer límites saludables

Establecer límites es otra técnica muy efectiva para reducir el estrés y la ansiedad. En muchas ocasiones, nos comprometemos a realizar más tareas de las que podemos asumir, lo que nos genera una gran presión y frustración.

También es importante aprender a decir «no» cuando sea necesario y establecer límites claros en cuanto a la cantidad de trabajo que podemos asumir. De esta manera, podremos concentrarnos en las tareas que son realmente importantes y reducir el nivel de estrés.

No estamos solos

Buscar apoyo en nuestros amigos, familiares o compañeros de clase puede ser de gran ayuda para reducir el estrés y la ansiedad.

Hablar con alguien que nos escuche y nos brinde su apoyo puede ayudarnos a sentirnos mejor y a ver las cosas desde una perspectiva diferente. Además, podemos aprender de la experiencia de otras personas que hayan pasado por situaciones similares a las nuestras.

Prácticas de relajación con ejercicio

Existen diversas prácticas de relajación que pueden ayudarnos a reducir el estrés y la ansiedad. Una de ellas es el yoga, que combina movimientos suaves con técnicas de respiración, meditación y fuerza. También existen otras prácticas de relajación como el taichí o el pilates, que pueden ayudarnos a sentirnos mejor con nosotros mismos y a mejorar nuestra flexibilidad y equilibrio.

Visualización positiva

Esta es una técnica que consiste en imaginar situaciones positivas y exitosas en nuestra mente. Esta técnica nos ayuda a generar emociones positivas y a enfrentarnos mejor a las situaciones estresantes.

Por ejemplo, podemos imaginar cómo nos sentiremos después de haber aprobado un examen o cómo nos veremos cuando hayamos completado un proyecto importante.

Tiempo para el ocio

Divertirse es fundamental para reducir el estrés y la ansiedad. Es importante dedicar tiempo a actividades que nos gusten y que nos permitan desconectar de las obligaciones académicas. Por ejemplo, podemos salir con amigos, practicar algún deporte o hobby, o simplemente disfrutar de una buena película o un buen libro.

En resumen, saber reducir el estrés y la ansiedad es fundamental para lograr un mejor desempeño académico y una mejor calidad de vida.

 

10 consejos para desarrollar habilidades sociales y profesionales
31 Mar 2023

10 consejos para desarrollar habilidades sociales y profesionales

Desarrollar unas adecuadas habilidades sociales y profesionales es una garantía de éxito en nuestro futuro laboral y para nuestra vida personal.

desarrollar habilidades

El mejor momento para desarrollar habilidades sociales que nos vayan a ser de utilidad en el ámbito de nuestra profesión es durante la carrera. La universidad es el entorno en el que, por primera vez, estaremos rodeados de personas que tienen los mismos intereses que nosotros, aun viniendo de lugares muy diferentes, de personas que son expertas en la rama del conocimiento que hemos escogido y donde podremos hacer contactos valiosos para más adelante. El tiempo que pasamos estudiando nuestra carrera no es solo para aprender y sacar el eTítulo universitario; si lo aprovechamos bien, servirá para abrirnos muchas puertas y para vivir experiencias únicas.

¿Y qué podemos hacer para sacar el máximo provecho de la situación y desarrollar habilidades útiles? Vamos a verlo:

1. Participar en actividades extracurriculares

Las actividades extracurriculares son una excelente manera de conocer gente nueva y desarrollar habilidades sociales y profesionales como son el trabajo en equipo y el liderazgo. Podemos unirnos a clubes, equipos deportivos o grupos de voluntariado y, además de hacer networking, podremos sacar créditos universitarios que nos van a ser muy útiles después.

2. Asistir a eventos universitarios

Asistir a eventos universitarios es otra forma de conocer gente nueva y desarrollar habilidades sociales. Pero no todo es hacer contactos, también se puede aprender mucho asistiendo a conferencias y congresos para hablar con expertos y yendo a ferias de empleo para hablar con profesionales de nuestro sector.

3. Desarrollar habilidades de comunicación

Las habilidades de comunicación son esenciales tanto en el ámbito social como en el profesional. Podemos mejorar nuestras habilidades de comunicación asistiendo a talleres o cursos especializados, pero también interviniendo en clase, participando en debates o presentando trabajos. Puede que al principio nos aterre hablar en público, pero es una habilidad que seguro vamos a agradecer tener bien trabajada en el futuro. Por cierto, tener habilidades de comunicación también incluye conocer la comunicación no verbal y debemos trabajarla adecuadamente.

4. Aprender a trabajar en equipo

El trabajo en equipo es una habilidad esencial en el ámbito profesional. Podemos desarrollar habilidades de trabajo en equipo participando en proyectos grupales o uniéndonos a equipos deportivos.

5. Desarrollar habilidades interpersonales

Las habilidades interpersonales son esenciales para establecer relaciones saludables y efectivas con los demás. La universidad nos brinda la oportunidad de estar en contacto constante con personas de culturas, ideas, intereses u orígenes distintos. Es una situación ideal para practicar la empatía y la escucha activa.

6. Buscar mentores

Es recomendable establecer relaciones significativas con nuestros profesores y buscar mentores en nuestro campo de estudio o profesión. Esto nos va a enseñar a relacionarnos con nuestros superiores y con personas de cualquier edad con el respeto debido.

7. Aprovechar las oportunidades de prácticas profesionales

Así podremos aprender habilidades específicas y ganar experiencia laboral que más tarde será muy valiosa para añadir a nuestro currículo. Hay que pensar que, cuando terminamos la carrera, nadie tiene esa «experiencia demostrable» que suelen pedir los reclutadores, así que nos estaremos diferenciando de la competencia desde el principio.

8. Buscar la retroalimentación de compañeros y profesores

No nos debe dar miedo pedir un feedback, saber qué ha parecido nuestro trabajo o presentación, preguntar qué cosas podemos mejorar, si nos hemos expresado de forma clara y directa, si nuestra expresión corporal ha sido la adecuada, etc. La percepción de los demás nos va a ayudar a ver si nuestro mensaje llega de la forma en la que queremos que llegue y a saber si lo que nosotros creemos que los demás perciben se corresponde con la realidad.

9. Desarrollar habilidades interculturales

Como decíamos antes, la universidad es el lugar ideal para conocer gente con intereses afines, pero también de culturas y orígenes distintos. Además, tenemos a nuestra disposición diferentes becas para viajar y podremos conocer a alumnos extranjeros que llegan a nuestro país. Para desarrollar habilidades valiosas, sería muy positivo aprender sobre diferentes culturas y saber trabajar con personas de diferentes orígenes.

10. Manejo de conflictos

Trabajar en equipo, conocer gente diferente y tener que cumplir una serie de objetivos crea una oportunidad estupenda para aprender a manejar y resolver conflictos, a mediar, a ser asertivo, a comprender otros puntos de vista, a mejorar nuestra empatía y a saber negociar. También puede darnos la oportunidad de aprender a trabajar con personas conflictivas o difíciles y saber manejarlo. Habilidades todas ellas que serán de gran utilidad para nuestra vida y para nuestro trabajo.

Recuerda que el desarrollo de habilidades sociales y profesionales es esencial para tener éxito en el mundo laboral y en la vida en general. ¡Sigue trabajando en ellas y verás cómo mejoran tus oportunidades y relaciones!